La importancia de un buen calzado para la salud de tus pies
Descubre cómo elegir el calzado adecuado puede prevenir problemas podológicos y mejorar tu calidad de vida.
El calzado que utilizamos diariamente tiene un impacto directo en la salud de nuestros pies y, por extensión, en todo nuestro sistema musculoesquelético. Un zapato inadecuado puede ser la causa de múltiples problemas podológicos que van desde molestias menores hasta patologías graves.
Los zapatos deben proporcionar soporte adecuado al arco del pie, permitir la movilidad natural de los dedos y ofrecer una amortiguación apropiada. El material debe ser transpirable para evitar la acumulación de humedad, que puede favorecer el desarrollo de hongos e infecciones.
Es fundamental renovar el calzado deportivo cada 300-500 kilómetros de uso, ya que la amortiguación se deteriora con el tiempo. Para el calzado de vestir, es recomendable alternar entre diferentes pares para permitir que se aireen y mantengan su forma.
Si experimentas dolor en los pies, rodillas, caderas o espalda, es posible que tu calzado sea parte del problema. En nuestra clínica realizamos estudios biomecánicos que nos permiten evaluar tu pisada y recomendar el tipo de calzado más adecuado para ti.